Después de pagar un rescate en Bitcoin (BTC) para recuperar el acceso a los datos que fueron robados por ransomware, una universidad en los Países Bajos pudo recuperar la criptomoneda y obtener una ganancia considerable de ella.
El incidente ocurrió en 2019 y, como resultado, la facultad, el personal y los estudiantes de la Universidad de Maastricht no pudieron acceder a datos personales cruciales, incluido el trabajo académico, según un informe. reporte por el diario holandés Volkskrant.
Para que la institución obtuviera acceso a los datos, los ciberdelincuentes querían el pago de un rescate de 200.000 euros (unos 208.000 dólares) en Bitcoin. Tras una exhaustiva investigación, la policía holandesa pudo localizar la cuenta bancaria de un lavador de dinero en Ucrania a la que se habían transferido 40.000 € del rescate.
Aproximadamente dos años después, lograron devolver la parte del rescate que se le debía a la institución. Desde entonces, el valor del Bitcoin que estaba almacenado en la cuenta había pasado de 40.000€ a 500.000€, más de doce veces el primer rescate que había pagado la institución.
Los datos estaban en riesgo de desaparecer
La Universidad inicialmente había decidido pagar el rescate ya que existía la posibilidad de que los datos se perdiesen.
“Los delincuentes cifraron cientos de servidores Windows y sistemas de copia de seguridad, lo que impidió que 25 000 estudiantes y empleados accedieran a datos científicos, bibliotecas y correos electrónicos”. Volkskrant dijo.
Las autoridades incautaron la cuenta y se descubrió que contenía otras criptomonedas. Esto evitaría que algunos estudiantes tomen exámenes o completen tareas académicas.
El rescate podría haber valido millones
En el caso de que se pagara la totalidad del rescate, el nuevo valor habría sido de 2,5 millones de euros, suponiendo que el precio de un Bitcoin se mantuviera igual durante ese período.
Michiel Borgers, director de tecnología de la información y la comunicación de la Universidad de Maastricht, dijo que los 300.000 euros adicionales se enviarían a un fondo que ayuda a los estudiantes que tienen problemas para cumplir con sus obligaciones financieras.
La policía continúa investigando el hecho con el objetivo de descubrir quién fue el responsable del crimen.