Según Reuters, la secretaria del Tesoro de EE. UU., Janet Yellen, confirmó que el Silicon Valley Bank (SVB) en quiebra recibiría ayuda del gobierno, pero descartó un rescate para el banco.
En respuesta a los pedidos de un rescate gubernamental del banco en quiebra, Yellen dijo que estaba trabajando con otros reguladores financieros para proteger a los depositantes. Agregó que no había planes para un gran rescate del gobierno.
El Secretario del Tesoro argumentó que las reformas bancarias creadas tras la crisis financiera de 2008 impedirían la emisión de rescates. Según ella, el sistema bancario estadounidense es más resistente y está mejor capitalizado que en 2008.
Por su parte, Yellen enfatizó que el foco de su intervención estaría en los depositantes. Sin embargo, se negó a proporcionar más información sobre si los depositantes recibirían un reembolso completo. En cambio, dijo que el gobierno reconoce plenamente cuán preocupante era esto para los depositantes.
Plan del gobierno de EE. UU. para Silicon Valley Bank
Con el comentario de Yellen, parece que el banco no recibiría un rescate. Sin embargo, informes han revelado que el gobierno de los EE. UU. estaba preparando una “acción material” para detener un colapso financiero más amplio.
Según Reuters, el gobierno está evaluando el impacto del colapso y considerando varias opciones para el banco, incluida la búsqueda de un comprador. El informe sugirió que la FDIC estaba tratando de encontrar otro banco para fusionarse con Silicon Valley Bank a partir del viernes.
La secretaria Yellen había dicho que la FDIC estaba considerando una amplia gama de opciones disponibles para resolver el problema de la empresa, incluida una opción de adquisición.
El colapso de SVB pone en riesgo 100,000 empleos
Mientras tanto, el CEO de Y Combinator, Garry Tan, dijo que más de 100.000 puestos de trabajo están en riesgo tras el colapso de SVB. Debido a esto, Tan está pidiendo a los CEO y fundadores de startups que firmen una petición dirigida al Secretario del Tesoro de EE. UU., junto con otros funcionarios reguladores.
Mientras que la petición no solicita un rescate del gobierno, pide que el gobierno se asegure de que las nuevas empresas afectadas estén debidamente protegidas.
“No estamos pidiendo un rescate para los accionistas del banco o su administración; le estamos pidiendo que salve la innovación en la economía estadounidense”.
Más de 5000 directores ejecutivos y fundadores que representan a más de 400 000 trabajadores han firmado la petición al cierre de esta edición.
En 2008, el gobierno de EE. UU. rescató a varias empresas afectadas por la crisis financiera. Varios analistas han argumentado que podría ser necesario un rescate similar para evitar colocar a otros bancos bajo la misma presión.
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