Twitter, Inc canceló hoy la convocatoria de ganancias trimestrales de este mes, citando su litigio en curso contra Elon Musk, el multimillonario CEO de Tesla, cuyo asediado intento de retirarse de una adquisición multimillonaria planificada de Twitter continúa a buen ritmo.
“Dada la adquisición pendiente de Twitter por parte de un afiliado de Elon Musk, no realizaremos una conferencia telefónica sobre ganancias, emitiremos una carta de accionistas ni proporcionaremos orientación financiera junto con nuestro informe de ganancias del segundo trimestre de 2022”, escribió Twitter en un comunicado.
Muchos en el espacio criptográfico habían apoyado con entusiasmo la oferta de Musk por Twitter con la esperanza de que integrara aún más las funciones criptográficas en la plataforma y sentara las bases para una adopción más amplia.
Hasta ahora, el principal efecto de la oferta de Musk ha sido la capacidad de Twitter para realizar sus negocios.
Twitter, sin embargo, lanzó un reporte detallando sus ganancias recientes.
En el segundo trimestre, anunció que había aumentado sus usuarios activos diarios en un 16,6 % hasta los 237,8 millones, mientras que sus ingresos cayeron un 1 % hasta los 1.180 millones. La recesión refleja, escribió, “vientos en contra de la industria de la publicidad” asociados con el macroentorno, presumiblemente Ucrania y las consecuencias posteriores a la pandemia.
También dijo que los ingresos habían sufrido “incertidumbre relacionada con la adquisición pendiente de Twitter por parte de un afiliado de Elon Musk”.
Twitter, Musk y Cripto
La problemática relación del gigante de las redes sociales con Musk comenzó en abril cuando el empresario acordó comprar la empresa a 54,2 dólares por acción, valorando la empresa en alrededor de 43.000 millones de dólares.
Entre los financistas de Musk había un grupo de empresas criptográficasincluido Binance y la empresa de riesgo criptoadyacente Andressen Horowitz, y se esperaba que implementara ciertas características de Web3 en la plataforma, como permitir micropagos.
Sin embargo, a medida que las acciones se desplomaron posteriormente y la inflación se fue en picada, Musk pareció tener los pies fríos, recurriendo regularmente a Twitter para criticar a la compañía y a sus ejecutivos.
Finalmente, el mes pasado, intentó retirarse del trato por completo, alegando que Twitter no había contabilizado correctamente la cantidad de bots que poblaban su aplicación.
Twitter lo niega: dice que no se mencionan los bots en el contrato firmado por Musk, y que el propio Musk afirmó que quería comprar la plataforma para “derrotar a los bots”, y llevó a Musk a los tribunales. Espera obligarlo a comprar la compañía o obligarlo a pagar una “tarifa de divorcio” de mil millones de dólares.
A principios de esta semana, un tribunal acordó una audiencia de “vía rápida” en la que comenzará el litigio en octubre.
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